Palabras claves: MASAJE/HISTORIA

Título: Terapia de masaje

Fuente:  http://hipusa.wholehealthmd.com/%5Cspanish%5Cpractypes%5CMassage%20Therapy_SP.htm

 

Texto completo:

¿Qué es?

El masaje es la manipulación de los tejidos blandos del cuerpo. Ayuda a disminuir el estrés y la tensión muscular, aliviar el dolor provocado por lesiones y acelerar la curación de ciertas condiciones agudas y crónicas. En la actualidad, millones de personas en todo el mundo se tratan con terapeutas de masajes como una forma de mantenimiento regular del cuidado de la salud.

Los masajes se han utilizado durante miles de años. Alrededor del año 2700 A.C., el texto chino Canon de Medicina Interna del Emperador Amarillo (The Yellow Emperor’s Classic of Internal Medicine) recomendaba que deberían utilizarse “ejercicios de respiración, masajes en la piel y la carne, y ejercicios en las manos y los pies” para tratar parálisis, enfriamientos y fiebre. En 400 A.C., el médico griego Hipócrates escribió sobre la necesidad de todos los médicos de realizar fricciones como remedio, en especial para tratar lesiones deportivas y heridas de guerra. Existen antiguos registros de Japón que también hacen referencia a la terapia de masaje y se sabe que la técnica ha sido utilizada por otras culturas, incluidas la egipcia, la romana y la árabe.

Las raíces de la terapia de masaje moderna fundada en la ciencia se originaron con Per Henrik Ling (1776-1839), un maestro de esgrima e instructor de gimnasia sueco que desarrolló un sistema terapéutico que incluía tanto masajes como ejercicios. En 1813, Ling fundó el Instituto de Gimnasia Central Real (Royal Central Gymnastic Institute) para que sus métodos estuvieran disponibles al público. En aquel entonces, el programa de Ling incluía lo que él llamaba “gimnasia médica” y “cura sueca por movimiento”. Más tarde, la combinación de ambas técnicas se conoció como masaje sueco.

 

Después de estudiar en Suecia en la década de 1850, George y Charles Taylor, dos hermanos médicos de la Ciudad de Nueva York, introdujeron la terapia de masaje en Estados Unidos. La técnica adquirió aceptación en forma gradual y fue ampliamente utilizada por los médicos hasta principios de la década de 1900. Pero a medida que se difundió la biomedicina y los nuevos equipos de “alta tecnología”, los médicos perdieron interés en esta terapia de trabajo intensivo. Un número reducido de especialistas en masajes continuó con la tradición hasta la década de 1970, cuando un renovado interés en la medicina alternativa desencadenó una gran demanda por esta técnica de curación.

 

En la actualidad existen unos 80 tipos distintos de masajes y formas de tratamientos corporales afines. Estas técnicas por lo general están organizadas en cinco grandes categorías:

Masaje tradicional europeo. Esto incluye métodos basados en conceptos occidentales convencionales de anatomía y fisiología. Comúnmente se utilizan cinco técnicas de manipulación de tejidos blandos: effleurage (movimientos largos y deslizantes); petrissage (movimientos de compresión y estiramiento); fricción (fricciones profundas y circulares); tapotement (golpes ligeros a modo de percusión); y vibración (movimientos de sacudidas rápidas muy sutiles). El masaje sueco, en la actualidad la técnica de masaje más empleada en el mundo, es el principal ejemplo del masaje europeo tradicional.

Masaje occidental contemporáneo. También basada en los conceptos modernos de anatomía, esta categoría incluye una amplia variedad de técnicas de manipulación que superan el esquema del masaje sueco. Entre las técnicas se incluyen: masaje neuromuscular, (una forma de masaje profundo que tiene por objeto llegar a los tejidos conectivos, los tendones, los ligamentos y los nervios, y liberar los nudos de tensión llamados puntos de presión); masaje deportivo (una combinación de masaje sueco y masaje de tejido profundo que trata específicamente los efectos del trabajo atlético en el cuerpo); mioterapia (una forma especializada de masaje muscular y estiramiento que utiliza presión manual profunda para liberar los puntos de presión).

 

Realineación estructural e integración de movimiento. Estas técnicas hacen hincapié en la estructura y los movimientos corporales. Los métodos organizan e integran el cuerpo en relación con la gravedad mediante la manipulación de los tejidos blandos o mediante la corrección de patrones de movimiento inadecuados. Algunos ejemplos incluyen: Hellerwork, Rolfing, método Feldenkrais, y Técnica Alexander.

Masaje oriental. Basadas en los principios de la medicina tradicional china, las técnicas del masaje oriental evalúan y recuperan la energía vital que se cree fluye a través de canales invisibles en el cuerpo humano. Estos métodos incluyen acupresión y Shiatsu.

Métodos basados en la energía: Estas técnicas, que no están fundadas en la medicina tradicional china, tienen por objeto ejercer un efecto sobre el campo de energía que se cree que rodea y penetra en el cuerpo humano. Esto se logra ya sea al aplicar presión o manipulación en el cuerpo físico, o al pasar o colocar las manos dentro del campo de energía o a través de él. Algunos ejemplos de métodos de energía incluyen terapia de polaridad, toque terapéuticoy Reiki.

 

Muchos profesionales de masajes utilizan una combinación de estos métodos, dependiendo de lo que el cliente necesite en el momento. Para más información sobre las distintas técnicas de masajes, consulte las entradas individuales en la biblioteca de consulta de WholeHealthMD.

¿Cómo funciona?

La mayoría de los tipos de masajes ejercen un efecto similar sobre el cuerpo en forma. Cuando los músculos se trabajan en exceso pueden acumular desechos corporales como el ácido láctico, que causa dolor, rigidez e incluso espasmos musculares. El masaje en general, y el masaje sueco, en particular, mejora la circulación sanguínea y linfática y proporciona oxígeno fresco y otros nutrientes a los tejidos afectados. Esto ayuda a eliminar las toxinas y a mejorar la recuperación.

 

Los músculos tensos también pueden comprimir los vasos sanguíneos y estirar los nervios, restringiendo así el flujo de sangre y causando dolor. A medida que se da masaje al área afectada, los músculos liberan gradualmente el bloqueo sobre los nervios irritados y el dolor disminuye. Los mismos mecanismos también logran que el masaje ayude en el proceso de recuperación de un músculo lesionado.

 

Además, se ha demostrado que los masajes aumentan la producción de endorfinas analgésicas y de serotonina, hormona que afecta el estado de ánimo. También puede disminuir la liberación de cortisol, la hormona del estrés. Por esta razón, por lo general se prescriben masajes como terapia complementaria para aquellas personas cuyos sistemas inmunológicos se ven comprometidos por el estrés.

 

 

Revisado y actualizado por: Lic. M. del Castillo Zayas (17/05/04)