Palabras claves: SALUD/DEPORTES/IMPEDIDOS FISICOS/DEPORTE DE ALTO RENDIMIENTO/CINESIOLOGIA/CAPACIDAD DE RENDIMIENTO FISICO/NIÑOS

Título: Pisa, Olimpia y otra respuesta

Título Original: Pisa, Olympia und eine andere Antwort.

Autor(es): Westermann-Krieg, Liesel

Traductor: Publio Cepero Fadraga (SETIDEP)

Fuente: Sportunterricht, Vol. 51, 2002, 12 p. 360-391. Ilus.

Texto completo:

De la misma forma que ahora se discute con fuerza sobre las listas del ranking de Pisa, de forma también apasionada se abordó el medallero de Sydney 2000. La discusión en círculos más estrechos y más amplios  fue extremadamente viva.

 

 

Deporte de alto rendimiento.

Al respecto en el FAZ, reconocido entre otras cosas también como el mejor periódico deportivo de Alemania se podía leer: “La nación ha ganado demasiado pocas medallas en Sydney, lo que no es sin embargo un delito, a fin de cuentas se pagará por ello. Por ende van ahora las federaciones en busca de dinero y discuten de forma preferenciada acerca del fomento de los jóvenes.

 

Lógicamente que sí se entrenan en otros lugares de forma más rigurosa a los talentos uno mismo se siente bajo tremenda presión. El logro de conceptos sobre la joven generación pertenece por tanto en estos momentos a la ocupación fundamental de los funcionarios alemanes del deporte. El llamado a los forjadores de talentos es cada vez mayor y ello da un poco la impresión de toque de acuartelamiento. Las llamadas escuelas de elite están de nuevo de moda otra vez, se acelera el ritmo la seducción, sustituir la formación mediante repeticiones, es grande.

 

El intento de fomentar talentos cada vez a edades más tempranas con la finalidad de obtener ya en la edad infantil un rendimiento mediante volúmenes extremos de entrenamiento. En el apuro general por encontrar nuevos conceptos se pide, sin embargo, que se tenga cuidado. Todos los conceptos tienen que ser por tanto bien analizados. Se ha de tener en cuenta que en nuestra ley fundamental una escuela deportiva sigue siendo una escuela y no puede convertirse en un cuartel o forja de medallas.

 

Sin embargo, la búsqueda de talentos puede comenzar tranquilamente desde abajo. Sólo tiene que poner a los niños y a su formación de la personalidad universal en el centro de sus reflexiones y no al objetivo de producir deportistas de alto rendimiento. “Hacer fuerte a los niños”, significa una acción de la central federal para el fortalecimiento de la salud. Teniendo en cuenta que “fuerte” aquí no significa “fortaleza en medallas”, es que se ha de comenzar mejor con una clase deportiva razonable. Poner en movimiento al grupo de niños de forma razonable es más importante que fomentar a unos pocos talentos. Un deporte escolar aceptable no sólo sería de provecho de todos los niños, sino que también aportaría más talentos para el movimiento –como base para un deporte de rendimiento más fuerte, cuyo fomento debe permanecer, sin embargo, libre de la idea obligada de producir vencedores y ganadores de medallas (comparar con Eder, 2000).

 

Eder volvió a escribir este comentario para la discusión del deporte de rendimiento con el título “Búsqueda de oro con estabulación”. El aclara sin lugar a dudas que nuestra tarea en la escuela no se ha de entender como una especie de búsqueda de oro y que no se puede comparar nuestro manejo de los niños, confiados a nosotros, con la estabulación.

Capacidad de rendimiento.

Pero con todo el amor por la libertad y la aversión a la presión y presiones tenemos que entender que incluso bajo la aceptación de la escuela como estabulación en la búsqueda de oro no existiría chance alguno de éxito para el medallero futuro. Nuestros niños no son lamentablemente esbeltos, aptos ni libres. Un estudio del DSB y la AOK acerca de la capacidad de rendimiento deportivo motor de los niños y jóvenes ha confirmado, lamentablemente, lo que esperaban pesimistas y observadores atentos.

 

Se investigaron las capacidades coordinativas y condicionales con los ejercicios más sencillos –lanzamiento del balón, flexiones, subir las escaleras, salto alto desde la posición y sostenerse en la espaldera sueca – y dio como resultado que al aumentar la edad desaparecen cada vez más y más  las capacidades en los años escolares subsiguientes. Incluso el número de accidentes en aumento está dado por esta carencia motriz generalizada.

 

Anualmente las cajas de la seguridad social desembolsan sumas de 60 mil millones de marcos por problemas de enfermedad, entre ellos, por carencias motoras y errores alimentarios, la mitad de estos por daños al sistema articular y en la espalda. Estos gastos aumentaron. No se avizora cambio alguno.

 

El Presidente de la Confederación alemana de Deportes, Manfred von Richthofen calificó la importancia del estudio en comparación con la necesidad del análisis sobre el corte de los Juegos Olímpicos de “inmensurablemente más importante”. La aptitud de la juventud es una cuestión esencial para nuestro país. La miseria deportiva escolar en Alemania necesita de una atención pública constante, dijo Von Richthofen al referirse al discurso básico pronunciado por el Presidente Federal Roman Herzog: “Al respecto hay que dar una batida por todo el país”. Hay que aprovechar las potencialidades, relativas a la disposición en pro de mayor movimiento, escondidas entre niños y jóvenes a fin de lograr un mayor amor por el deporte, que hace posible que perdure la vida.

 

Aparentemente contradictorios con los resultados de este estudio bajo el título de “Nivel de movimiento de los niños y jóvenes en Alemania” resulta el hecho de que el deporte es, sin embargo, la asignatura preferida de la mayoría de los alumnos en la escuela. Aproximadamente el 60% de los encuestados admitieron que querían tener más clases de deporte. La tendencia, sin embargo, que al aumentar la edad disminuye la práctica de deporte y que en las muchachas ello está menos enfatizado que en los jóvenes. El 84% de los jóvenes de 12 a 18 años de edad, de acuerdo con sus propios datos, practican deporte después de las horas de clase, el 34% incluso durante cuatro horas y más (comparar con Reinsch 2000).

 

Los niños aman a su clase de deportes. La clase de deportes significa movimiento. El movimiento sana, pero nuestros niños no son sanos, según lo muestra nuestro estudio. La AOK pretende equipar ahora a los maestros del deporte con pruebas de aptitud. ¿Garantizan las pruebas de aptitud física aptitud?

Socialización

Los funcionarios deportivos, médicos, responsables de la salud no están solos con sus preocupaciones y consejos. No solamente ellos miran más allá del próximo medallero o de la próxima prueba de aptitud. De su lado se encuentran los psicólogos sociales y los científicos de la educación y llaman la atención acerca de las condiciones básica generalmente cambiantes del crecimiento, del daño en el desarrollo sano. Indican la necesidad de que ante un cambio de estructura social que se presente, también se debe producir un cambio en las instituciones de la educación. Rolff y Zimmermann (1993) explican que la infancia es diferente ahora que antes. Para poder entender mejor ahora a los niños, para poderlos apoyar y ayudarlos resulta necesario saber, que en realidad han cambiado.

 

Este cambio en la vida diaria del niño los autores lo describen y explican por medio de una teoría de socialización sociológico – cultural. Al respecto se habla de fenómenos tales como reducción de la apropiación propia del medio ambiente, de la experiencia de segunda mano mediante los medios masivos de comunicación y de la profesionalización de la educación y el control. Son presentados como intranquilos y reconocidos como las causas de los decursos cambiantes del desarrollo. Rolff  y otros subrayan la impotencia con que enfrentan los niños la presión de éxito del poder de socialización impuesto por los padres, el jardín de infancia, la escuela y la sociedad (comparar con Rolff y Zimmermann, 1993).

 

Les falta la socialización de la calle, que sería lógicamente comprensible para las generaciones anteriores, falta la ausencia de control, que en tiempos de posguerra permitió más el placer de la aventura y la iniciativa propia.

 

¿Cómo se ha de entender esto?  Permítanme analizar algunos aspectos biográficos, a partir de que sea yo un niño de ese periodo de posguerra:

·         El circo: En mi ciudad de origen, una pequeña ciudad como en cualquier parte de Alemania se presentaba un circo. Las carpas estaban no lejos de la casa de mis padres. Mi hermana mayor Ute no podía ir con los vecinos, demasiado caro para las tres hijas, afirmaba mi madre. Liesel de cuatro años de edad, la del medio, encuentra con dos jóvenes vecinos un hueco en la cerca y un pasadizo por la salida trasera.

 

·         Algo similar ocurría con el club de gimnasia. “Mami, quiero practicar gimnástica”. Mi madre me dejó ir, me hacía, sin embargo con otros niños con las barras para sacudir alfombras o en los portones de los jardines y sólo se percató cuando el cajero le presentó el cobro del club. Del balneario me apropié de la misma forma y a partir de allí encontré con otros niños el camino del atletismo.

 

Fallas de control, socialización de la calle, andar los caminos propios y poder andar, eso fomenta la confianza en sí mismo, optimismo social. Sí ahora faltan los espacios libres y eso es algo que Rolff y Zimmemann afirman y muchas madres que por las tardes manejan el taxi familiar, apoyan este enunciado, sí falta el propio yo para ocupar los espacios vacíos entonces ¿la subjetividad en un mundo de vida industrializada es tan solo la adaptación pura al predominio de las relaciones? ¿Son entonces los individuos tan solo anatemas de los sistemas” como los llama Adorno?

 

^Ahora cada niño, quiéralo o no, nace en un sistema cultural preestablecido y se encuentra necesariamente en contacto con cosas y hechos, creados por generaciones anteriores.  Pero esto no tiene lugar de forma automática, pasiva sino como una tarea que ha de ser realizada activamente y siempre de nuevo. Sí se trata de la entrada al circo o al club – la apropiación es una actividad; siempre es activa en el sentido de que procede del enfrentamiento del sujeto con la cultura material y simbólica. El medio ambiente no es recibido por el niño de forma pasiva, tampoco por el niño de nuestro tiempo, sino que es procesado, activamente elaborado.

 

A partir de la actividad de apropiación creativa surge la conciencia y los objetos y símbolos reciben su sentido y su importancia. Los significados existen por un lado de forma objetiva, es decir, independientemente de la relación individual del hombre en particular con respecto a la realidad que le circunda (…..) mientras que por otro lado –y ello se refiere a la elaboración subjetiva de lo previamente hallado – se interpreta esta realidad de forma individual. Una bicicleta para niños, por Ej. Tiene el significado objetivo de una máquina que se acciona mediante la fuerza del cuerpo; para el niño en particular puede tener, no obstante, un sentido completamente personal, como medio de una vivencia de competencia a través del dominio de la conducción de la bicicleta, como medio de vencer en la competencia con otros o como fuente del dolor producto de una caída” (Rolf & Zimmermann, 1993, 166).

 

Estrategias de consolidación del aprendizaje en su conjunto.

No se puede cansar uno de subrayarlo: se trata de las ofertas, de las ofertas de aprendizaje. Se trata de las ofertas de movimiento. Tanto el periodista deportivo Eder como también la AOK, el DSB y también los científicos de la educación Roff y Zimmermann plantean que nuestros hijos presentan carencias en lo referente a las experiencias motoras y que ellos no nos disculpan a nosotros, los adultos por la responsabilidad de tales carencias. Tenemos que hacerle ofertas.

 

No debemos, sin embargo, pasar por alto el planteamiento de Rolff y Zimmermann. No es el deporte escolar, con o sin prueba de aptitud, no es la búsqueda de talentos lo que está en el centro de sus preocupaciones, se exige mucho más, las alternativas para la socialización de la calle, es la realidad ricamente conformada en la vida diaria de los niños como exigencia para la actividad de la apropiación productiva.

 

Queremos apoyar la formación de la conciencia de nuestros niños y tenemos que estar claros también, a partir del criterio de la investigación moderna del cerebro, de cuanto depende el desarrollo de la conciencia individual de la percepción, de la percepción física.

 

Cito del título del trabajo de la revista Spiegel número 1/2001: “El “yo” surge en un hombre sano mediante un chequeo permanente de la realidad: En todo momento los sentidos sensoriales informan el estado en se encuentra el cuerpo y su medio. La conciencia sería verdaderamente ante todo la capacidad de almacenar conocimientos a partir de la perspectiva del propio cuerpo, seleccionarla y visualizarla (Taufetter, 2001, 148).

AMY y la educinesiología

Quiero aclararlo tomando como base un ejemplo de Nannaford. Ella escribe sobre la muchacha llamada Amy: “Amy era una hermosa niña de diez años con largas trenzas doradas y una sonrisa radiante. Para una alumna de quinto era normal en su talla, pero cojeaba a ojos vistas porque arrastraba incluso un pie. Y su estilo lingüístico era enredado y realmente monosilábico, por lo que resultaba difícil de entender. Amy había sufrido daños cerebrales a la edad de seis semanas por maltrato físico. Producto de su tierna madre y muy especialmente de su padrastro ella se convirtió en una niña activa y cariñosa.

 

Teniendo en cuenta que Amy no podía leer, escribir, ni tampoco comunicarse, fue al aula separada de la escuela  con cinco niños “con trastornos de conducta”. Por ese tiempo trabajaba yo como consejera en la escuela primaria y pedí me asignaran a tres niños de ese grupo diariamente durante el receso. Amy pertenecía con otros dos niños de 8 años de edad a ese grupo. Uno de los jóvenes estaba clasificado como retrasado mental (también sus padres eran vistos como retrasados mentales), el otro joven tenía trastornos en el comportamiento, ya que padecía de fuertes arranques de furia.

 

Me encontré con los niños en mi pequeña oficina, que era apenas algo mayor que un escaparate de pared, y pronto se familiarizaron entre si. Durante la primera semana realicé con cada niño la prueba de Dennison (1) sobre la lateralidad y más tarde realicé diariamente cinco minutos de gimnasia cerebral (2). Al respecto se trata de ejecutar simples movimientos del cuerpo, que activan todo el cuerpo, especialmente las esferas de los lóbulos frontales.

 

Más tarde fueron al aire libre y patearon un balón de fútbol por aproximadamente 10 minutos. En caso de discusión existía la regla de que cada uno tenía que adoptar la posición de la gimnasia cerebral conocida por Hook ups durante dos minutos. Una vez que los niños se calmaban de esta forma y lograban una integración podían expresarse razonablemente sobre su frustración o su impedimento. Este procedimiento condujo a que afloraran los sentimientos en forma adecuada y que cejara la tensión. Sentarse en la posición de Hook ups fue un instrumento maravilloso, que fomentaba la honestidad sin miedo o empleo de la fuerza.

 

Después de dos meses de trabajo con Amy llamó su madre para contar acerca de acontecimientos excepcionalmente positivos. El pediatra de la familia le había expresado su asombro acerca de la nueva capacidad de Amy de hablar en oraciones.

 

Después de varios meses Amy pudo centrar y golpear el balón por lo que los jóvenes jugaban ahora gustosamente con ella. Su cojera había desaparecido ostensiblemente y Amy podía patear el balón de forma totalmente recta.

 

A Amy le gustaban los caballos pero el caballo que había pintado para mí el primer día sólo dejaba percibir su color. Al final del curso escolar se podía reconocer el caballo en su dibujo. Después de cinco meses Amy había alcanzado el nivel del segundo grado en lectura y le gustaba escribir. Después de 7 meses dijo una mentira convincente, lo cual demostraba que podía aplicar ahora creativamente también capacidades cognoscitivas más exigentes. Al final del curso escolar había alcanzado en la lectura prácticamente el nivel de la clase, escribía historias realmente ocurrentes y podía comunicarse con éxito.

 

Amy había ido a la escuela por cinco años y anteriormente no había casi tenido éxito a pesar de haber contado con buenos maestros. Su éxito repentino tuvo lugar con la introducción del movimiento en su decurso diario –movimiento en forma de gimnasia cerebral, fútbol, arte y música. También los jóvenes lograron en este año progresos asombrosos en sus rendimientos escolares. Estaban además en mejores condiciones de permanecer tranquilos y relajados ante situaciones emocionalmente difíciles” (Hannaford, 1997, 15ff.).

Comprensión de la salud

Ante el comentario crítico del FAZ acerca de la tendencia de la búsqueda del oro con la posición férrea, el conocimiento de la niñez en transformación y la pérdida de la socialización de la calle o los éxitos asombrosos de los movimientos cruzados de la educinesiología con la Brain Gym (gimnasia cerebral) y los resultados de la investigación cerebral más novedosa nos vemos obligados a una comprensión conjunta de la salud:

 

La Organización Mundial de la Salud (WHO) define desde 1986 a la salud como “estado del bienestar social y moral, del perfeccionamiento físico” (citado según Zimmer, 1999, 31).

 

¿Qué llama la atención?

La salud se formula positivamente y no de forma negativa caracterizada por la ausencia de enfermedades. Y la extensión del concepto de salud conduce de las dimensiones físicas del alma, de lo social hasta un punto de vista ampliado de la salud (comparar con Zimmer, 1999,31). A fin de analizar la dinámica del fenómeno de la salud Hurrelmann, el científico de las ciencias de la educación y sociales de Bielfeld, completaba el concepto al describir la salud como un acontecimiento “actual de la creación y mantenimiento de la capacidad de acción social, física y psíquica de un hombre en todo el transcurso de su vida completa” (citado por Zimmer, 1999, 32).

Constructivismo

En relación con esta comprensión de la salud se reconoce también un cuadro humano de conjunto. No se trata del cuadro humano de Behavourismo, que en la conciencia de su imitación que se expresa con especial intensidad en aquella sentencia famosa de Watson a comienzos del siglo pasado:

 

“Denme una docena de lactantes de buena constitución, sanos y mi mundo propio, completamente especial, en el que los pueda educar y garantizo: Al azar tomo a uno y lo entreno para ser un especialista  a la medida –médico, juez, artista, comerciante y también predicador y ladrón, independiente de sus talentos, predilecciones, inclinaciones, capacidades o de la raza de sus ancestros” (citado por Schwartz, 1993, 68).

 

Entrenar, producir, crear mediante manipulaciones del exterior, no es ese el cuadro del hombre, al que se refieren mis reflexiones.  Sobre la base de la comprensión planteada de la salud se trata de un cuadro humano de conjunto, reconocible por la psicología humanista, que le sirve de base también al principio genético estructural del psicólogo Piaget:

 

“Piaget habla siempre del niño activo, creativo. Su tesis fundamental plantea que el hombre a través de toda su vida es activo, curioso y pródigo en invenciones. A partir de aquí se espera que el saber tenga un determinado objetivo, en particular ayudar al individuo en la adaptación al medio ambiente. Los hombres buscan de forma espontánea contacto e interacción con el medio y de forma activa buscan también retos. Los niños, que se dejan por sí mismos, investigan, aprenden y descubren.

 

Para Piaget los niños construyen su mundo, en la medida en que ordenan la materia prima al observarla, olfatearla y percibirla.  Basamento importante de su teoría es comprender como los hombres interpretan y modifican las informaciones recibidas a través de los sentidos. “No los fenómenos en sí mismos, su interpretación influye sobre el comportamiento (….). Adultos y niños construyen y reconstruyen de forma permanente su conocimiento del mundo, tratan de darle a sus experiencias un sentido y estructurar su conocimiento de forma más efectiva y cohesionada.

 

Los dos principios básicos del desarrollo humano son según Piaget la organización y la adaptación. Los dos dibujos evidencian de qué se trata en el caso de la capacidad de organización. En la foto muchos ven un búcaro o una copa pero también se pueden reconocer dos perfiles humanos. Aquí los hombres ven ya sea una mujer vieja o una joven dama de mundo al estilo de Toulouse Lautrec.

 

Hay que esforzarse por ver las dos cosas de forma continuada y experimentamos de esta forma cuan activa y subjetiva ha sido confeccionada nuestra percepción. Lo que se ve depende de cómo se organiza el estímulo. Para Piaget la inclinación al ordenamiento es un rasgo esencial del hombre. En el transcurso del desarrollo los niños construyen estructuras cognoscitivas, que son el resultado de la interacción de la madurez y la experiencia”  (Musen y col., 1993, 229 f.).

 

En el centro de las investigaciones de Piaget se encuentra el desarrollo cognoscitivo. Para mi resulta importante subrayar esto de manera especial porque precisamente el fomento de las capacidades cognoscitivas es tradicionalmente la tarea principal de la escuela. La crítica escolar pública no regresa una y otra vez desde PISA a este punto de las carencias cognoscitivas de nuestros niños escolares y no quiere, bajo ningún concepto, tiempo escolar en orquídeas – desaparecer iniciativas. Conocemos los resultados desalentadores de las comparaciones de los rendimientos escolares internacionales. Sí ahora se reconoce, sin embargo, la psicología del desarrollo cognoscitivo y la investigación cerebral moderna y el valor de la actividad, de la percepción actuante, de la percepción en su conjunto mediante la participación de todos los sentidos como premisas irrenunciables del desarrollo, entonces no se puede dudar de la legitimidad científica del proyecto “escuela movida – escuela del futuro”. El movimiento es la puerta del aprendizaje.

“Escuela movida – escuela del futuro”

Espero haber expuesto que la necesidad de niños sanos y activos, no es el resultado de una búsqueda cegadora de medallas político – deportivas, o de una ideología de globalización desgarrada de PISA, sino que la escuela movida es un acceso a la aptitud tanto intelectual como física. Una sociedad que quiere existir en tiempos de globalización tiene que posibilitar y configurar procesos de socialización, que no presenten “fachadas del yo” excesivamente adaptado. En la franqueza de la estructura de la sociedad posmoderna  no se logra ya más en primer término con las modificaciones vertiginosas del conocimiento el equilibrio social, la seguridad del comportamiento individual y la satisfacción mediante la competencia especializada sino únicamente mediante esta y la competencia social.

 

El niño rápido, alegre y curioso es un niño en movimiento y sometido a cargas, que aprueba las situaciones de la escuela y siente alegría por las comparaciones en los rendimientos. Conjuntamente con la discusión sobre las horas de alemán y matemática al análisis pertenece también el tiempo de movimiento en un área para el movimiento motivador. Hagamos fuertes a nuestros niños como quiere la campaña de la BzgA, hagámoslos alegres, mantengámoslos contentos y confiados – en otra palabra en movimiento.

 

No creo que con un paso ocupemos mejores lugares en PISA o en los medalleros de los juegos y podamos salvar los rescatar los informes sobre salud. Por el contrario opino que debemos comenzar con la “escuela movida” sencillamente allí, donde estamos, para podernos alegrar del éxito de los pequeños pasos yendo en la dirección correcta.

Observaciones:

(1)        Paul Dennison es el creador de la educinesiología, la que trata de eliminar bloqueos de energía en nuestro sistema nervioso. La red nerviosa es estimulada mediante la experiencia sensorial y las experiencias se almacenan como informaciones. Mientras más y con mayor intensidad se activen las áreas del cerebro, más complejo y flexible resulta el cableado del sistema nervioso.

(2)        El Dr. Dennnison desarrolló el programa Brain Gym (gimnasia cerebral) en el enfrentamiento con su propia dislexia y trastorno visual y experimentó la importancia de la integración de las dos mitades del cerebro.

 

Literatura

BsgA.: En el club deportivo hacemos niños fuertes.  Materiales para la profilaxis de las adicciones en el deporte masivo.

Eder. M. (18 de noviembre del 2000)  La búsqueda de oro con una posición férrea.  FAZ

Gudjons, H. (1997).  Conocimiento pedagógico elemental (5. Edición) Bad Heilbronn: Klinkhardt.

Hannaford, C. (1997).  Movimiento – la puerta de la vida (2. Edición).  Freiburg: VAK

Mussen, P. H. Y col. (1993).  Libro docente de la psicología infantil, 2 tomos, Stuttgart: Klett.

Reinsch, M. (2000, 16 de noviembre). “estar apto” es algo que la escuela debe hacer.  FAZ

Rolff, H.-G & Zimmermann, P. (1993). La infancia sometida a  transformaciones (3. Edición). Weinheim: Beltz.

Schwartz, S. (1993).  De cómo Pawlow llegó al perro.  Munich: Heyne-

Taufetter, G. (2001).  Humildad ante el último acertijo.  Der Spiegel, 1, 148 ff.

Zimmer, R. (1999).  Manual de psicomotilidad.  Freiburgo: Herder.

 

Revisado y actualizado por: Lic. Mariela del Castillo Zayas (10/08/03)