Palabras claves: EJERCICIOS TERAPEÚTICOS / PROFILAXIS
Título: CONJUNTO DE ACTIVIDADES PARA EL ADULTO MAYOR EN EL CÍRCULO DE ABUELOS “CAMILO CIENFUEGOS” DEL COMBINADO DEPORTIVO LPV
Autores: MsC Elida Balbuena Imbernon, MsC Ana María Pons Núñez, MsC.Ana María Peña Rojas
Email: anapon@ult.edu.cu
Con el objetivo de evaluar la participación de los abuelos en El Circulo “Camilo Cienfuegos” del reparto Buena Vista en el municipio Las Tunas se desarrolló una investigación en el período comprendido entre octubre de 2009 a mayo de 2010. Se realizó un análisis detallado de la participación, de las enfermedades, gustos y preferencias de cada anciana. Se constató que no existe participación masculina, el promedio de edad es de 62 años, la estatura oscila entre 1,49 y 1,71 cm y el peso entre 50 y 78 kg, el 54,0 % de las ancianas presenta enfermedades de hipertensión arterial, artrosis (38,0%) y de las vías respiratorias (13,0%), el 50 % de las participantes se incorporó hace menos de un año. El 95,8% de ellas opina que la actividad física les reporta beneficios a la salud, les permite adquirir nuevas amigas y compañeras y valoran el conjunto de actividades del círculo de abuelos de muy interesante. La mayoría de las participantes propone se incrementen los juegos participativos y la recreación en la playa, así como el 70,8 % propone la gimnasia y los juegos de mesa, en menor por ciento valoraron las visitas al cine y bailar.
En la investigación se utilizaron diferentes métodos del nivel teórico: el histórico-lógico, inductivo-deductivo, análisis-síntesis, sistémico–estructural y del nivel empírico, la encuesta y la observación estructurada y de las técnicas estadísticas, el cálculo porcentual.
INTRODUCCIÓN
Desde hace varios años se vienen realizando esfuerzos para desarrollar programas y servicios dirigidos a obtener el mejor bienestar posible al llamado grupo de la tercera edad con una atención que se ha ido desarrollando paulatinamente con el criterio de mantener al anciano en el seno de la familia y la comunidad.
Cuba es uno de los países latinoamericanos más envejecidos. La magnitud alcanzada en este orden y la rapidez con que se ha transformado nuestra pirámide poblacional constituye una preocupación en los años futuros a nivel mundial, la cual requiere de una acción cooperativa y solidaria que, trazando políticas y estrategias nacionales e internacionales tiendan a materializar en forma afectiva dicha ayuda. En los últimos años gracias a nuestra Revolución y los adelantos científicos y tecnológicos, la esperanza de vida se ha alargado notablemente alcanzando en la actualidad 77 años.
Si contribuimos a prolongar su vida, manteniendo su vitalidad física e intelectual podremos seguir tomando de ellos sus experiencias y transformarlas en nuestros propios éxitos, esto implica actividad física, participación social, emocional y un alto compromiso consigo mismo. Al tener en cuenta sus valores humanos para la vinculación con la sociedad y el mundo que los rodea, es preciso dotarlos de medios para enfrentarse a la realidad. Esta tarea nos corresponde fundamentalmente a los trabajadores de la cultura física en conjunto con el personal de salud que integran el consultorio del médico de la familia en la lucha por la salud y la longevidad.
Por la gran importancia que representa para la salud de estas personas pertenecer a un círculo de abuelos se realiza la investigación para determinar las causas de la baja incorporación en estos momentos y cómo lograr mejores resultados.
Se observa cómo en el Círculo de Abuelos “Camilo Cienfuegos” del Combinado deportivo LPV de la comunidad de Buena Vista los profesores planifican actividades que casi siempre son las mismas, que por su constante repetición, los abuelos las rechazan, pues pierden motivación y el deseo de participar. No hay en este círculo adultos mayores del sexo masculino.
Todo esto conlleva que exista:
Poca motivación en el desarrollo de actividades organizadas por este grupo.
Insuficiente conocimiento respecto a variantes prácticas en el desarrollo de actividades con fines de disfrute.
Insuficiente participación de los adultos mayores en las actividades del Círculo de Abuelos.
Por lo que proponemos mejorar la participación del adulto mayor al Círculo de Abuelos “Camilo Cienfuegos” del Combinado deportivo LPV de la comunidad de Buena Vista.
DESARROLLO
Las necesidades e idiosincrasia de los abuelos cubanos es un elemento importante a tener en cuenta para determinar la práctica de deporte o alguna actividad física al aire libre en aras de mantener la salud y de adquirir niveles insospechables en las diferentes etapas de la vida, lo cual ha sido constante preocupación del Estado y el Gobierno Revolucionario cubanos.
Los resultados hasta ahora en este campo son consecuencia directa de ese camino iniciado a partir de 1984, cuando la dirección de las actividades físicas y deportivas tomaron un nuevo rumbo: desarrollo de actividades físicas en la población que se enmarcan en la tercera edad, ya que la práctica se hacía de forma espontánea y sin un sentido común en toda la nación.
Al involucrarse todos los factores que tienen repercusión significativa y directa en el papel que deben jugar los entes sociales para mantener un desarrollo adecuado de la persona, se establecen entre el MINSAP y el INDER acuerdos que favorecen asumir esta labor; unidos a ellos, aparece en la palestra la combinación de actividades físicas y salud bajo las recomendaciones preliminares del Dr. Raúl Mazorra, eminente médico cubano quien hizo aportes significativos e importantes en este sentido vinculados a las tareas de caminar, correr y la necesidad de reducir la cantidad de grasa acumulada en el cuerpo en función de la vitalidad para enfrentar las tareas cotidianas.
En Cuba, en mayo de 1996, se celebró el Primer Encuentro Iberoamericano de Asociación del Adulto Mayor y a finales de 1998, toma partido el grupo de expertos bajo la tutela del MINSAP y la Organización Panamericana de la Salud, por lo que se reúnen para aleccionar sobre la importancia que para la sociedad tienen los adultos mayores;
teniendo en cuenta la trascendencia del tema, el 1ro de octubre de 1999 es declarado como Día Internacional de la Persona de Edad, celebrado a través de organizaciones, de marchas internacionales en Ginebra, Londres, Nueva York y Río de Janeiro, enarbolando en el planeta el lema “Hacia una sociedad para todas las edades”.
A raíz de esta alegoría en varios países se organizan grupos de expertos para poner
en práctica los ochos objetivos mundiales sobre envejecimiento para el año 2001, tarea
en que tampoco nuestro país se queda atrás. Siguiendo este camino se conforman una
serie de grupos estatales que se encargan de desarrollar estudios e investigaciones
científicas en la tercera edad, así como la repercusión e incidencia del proyecto cubano
en la calidad de vida de los abuelos. Se plantea que para este año uno de cada cuatro
cubanos sea un adulto mayor por lo que Cuba brinda asesoría a través del Centro
Iberoamericano de la Tercera Edad (CITED), radicado en el Hospital General “Calixto
García” en La Habana.
Los llamados círculos de abuelos en los que se agruparon a las personas que asistían a
las actividades afloraron en este sentido en las diferentes regiones del país, teniendo la
oportunidad de poner en práctica ejercicios bien concebidos. Las orientaciones
metodológicas establecidas al respecto incidieron mucho en el perfeccionamiento
ulterior de este gran movimiento, pues se dirigían las actividades en correspondencia
con los niveles que se preestablecían de acuerdo a la patología y capacidad de trabajo
que poseen los abuelos.
Según Ceballos Díaz, el cuerpo humano está hecho para ser usado, de lo contrario se
deteriora; si se renuncia al ejercicio, el organismo funciona por debajo de sus
posibilidades físicas, por tanto “Un cuerpo que no se ejercita utiliza solo alrededor del
21% de la energía posible de que dispone, pero este bajo nivel de rendimiento puede
incrementar hasta 56% con la práctica regular de ejercicio físico este momento de
crecimiento orgánico puede ser apreciado en todos los ámbitos de la vida”
Cuando estamos en presencia de tales “achaques” es importante tener en cuenta que
“… El nivel conservador de una persona lo puede llevar a ser tendencioso a moverse
con lentitud y con precaución, infravalorando sus capacidades físicas y perdiendo la
confianza de sus recursos y en sí mismo” argumenta el catedrático Ruiz L
Especialmente los encargados de llevar a cabo las actividades físicas con estos fines
en la población deben estar al tanto de los factores sociales, y tener en consideración
que es importante estudiar estos casos, así como desarrollar labores persuasivas y de
concientización para involucrar a estas personas a la práctica sistemática de
actividades físicas correctamente dirigidas por los técnicos o especialistas, siempre bajo
la supervisión del personal de la salud.
Hay personas que basadas en las justificaciones y autoprotección a las que se les
añaden una enfermedad, terminan por desarrollar una percepción generalizada de sí
mismo, como personas poco competentes, aceptando ser incapaces. En tal dirección es
importante observar y recomendar a los implicados que deben trazarse una serie de
estrategias compensatorias, que pueden ser:
1. Trabajo con su propio ritmo: con el que la experiencia le ha mostrado que es
posible tener éxitos.
2. Ahorrar energías, con la conciencia de sus limitaciones, empleando los recursos
ajustados a las demandas de las tareas de una forma consciente.
3. Anticiparse a su propia actuación: prever lo que puede ser necesario para
completar la tarea motriz.
4. Controlar el desarrollo de sus acciones: controlar las acciones en la precisión y
calidad del movimiento y no en la rapidez en la ejecución.
Es por eso, que se debe tener en cuenta no tratar de convertir la sesión de clases en
una competencia o área de entrenamiento sino todo lo contrario, pues al no precisar en
los renglones anteriormente planteados puede provocar una ruptura de los principios de
las clases de Educación Física con estas personas. Al respecto Scharll M (2000: 139)
plantea que la sesión de clases con los abuelos no debe sobrepasar los 45 minutos de
duración y la cantidad de miembros debe ser entre las 15 a 18 personas, sin
excederlas. También es interesante tener a mano las referencias que examinen las
relaciones existentes entre las actividades teniendo en cuenta que el envejecimiento
puede ser “saludable” en dependencia del nivel de formación y escolaridad alcanzado.
Los autores consultados plantean que la formación académica de las personas con
estas edades tiene una incidencia positiva en la asimilación de las actividades o
ejercicios que se aplican.
La formación académica de las personas que pasan a ser abuelos – mayores de 60
años, actualmente tiene una repercusión en el dominio del convencimiento asociado,
así como de la manifestación de las particularidades sociológicas que en el ámbito
gerontológico se están declarando: pues ellas tienden el puente hacia la reflexión y
concientización del técnico de la cultura física que atiende la actividad, en busca de que
su labor sea cada vez más perfecta, motivado por el propio desarrollo intelectual que
han adquirido a lo largo de la vida.
La realización de ejercicios físicos debe estar acompañada por consejos prácticos, así
como los aspectos psicológicos que pueden ser un elemento orientador de la actividad
específica que se recomienda, la introducción de motivaciones adecuadas. La
consecuencia de resultados que les satisfagan constituyen un acicate que,
inteligentemente empleados garantizan la perseverancia de los ancianos de estar cada
vez más aptos por lo que se recomienda profundizar en la búsqueda de métodos
idóneos para trasmitir el mensaje, que enseñen y eduquen ajustados a la senectud
factor indispensable para desarrollar las actividades con las personas de la tercera
edad.
Es importante que los profesionales encargados de planificar, concebir y materializar las
actividades con los abuelos busquen vías, métodos y didácticas contemporáneas que
sean eficaces para que su labor obtenga la mayor calidad posible, a la vez que les
servirán de hilo conductor para implicarse directamente en una vieja aspiración del
hombre: vivir más y mejor. Los recuerdos o experiencias emocionalmente relevantes
tienen una gran incidencia en las actividades asumidas por las personas de la tercera
edad, pues al participar en las diferentes actividades físicas es de suponer que pongan
en práctica un cierto cúmulo de experiencias motrices y lúdicas que poseen en la
“memoria motriz”.
Lo que conlleva crear un acervo motriz determinado que les permita ejecutar
inimaginadas formas de ejercicios, los que más tarde, en otra etapa de la vida, se tienen
presentes con el decursar de los años. Ellos se convierten en una factura a la que se le
“echa mano” en los momentos necesarios, por lo que su información, se convierte en un
arma para preservar lo adquirido en la etapa temprana de la vida.
Para el logro de los objetivos trazados la cultura física toma como medios:
• La gimnasia (ejercicios para el desarrollo físico general, marcha, etc.).
• La caminata.
• Tablas gimnásticas.
• Los juegos.
• Actividades recreativas.
Estas actividades responden a su riqueza de ejercicios y movimientos, a las
necesidades de los ancianos de vencer la inmovilidad, la incapacidad, la disminución de
funciones, así como la pérdida de habilidades y hábitos motores.
La gimnasia es la actividad diaria que desempeña un papel principal en la planificación
de las actividades físicas programadas para las personas de edad avanzada. Influye
favorablemente sobre el organismo resultando un elemento positivo, antivalidante y
resocializante en esencia.
Caminar a paso normal diariamente es recomendable para abuelos que no han
realizado actividad física sistemática, ya que la misma adapta al organismo a una nueva
carga de trabajo.
Su dosificación estará en dependencia de la actividad física de los practicantes por lo
que es recomendable el criterio médico para su mejor clasificación (distancia y tiempo a
caminar). Con el propósito de lograr mayores opciones de actividades físicas y
recreativas que den respuesta a los intereses y motivaciones de la población de la
tercera edad, se hace necesario un vínculo de trabajo entre el profesor de Cultura
Física y el promotor de recreación del territorio.
Las actividades recreativas bien dirigidas y organizadas, constituyen una actividad
sana, alegre y educativa que contribuye positivamente al desarrollo psico-físico y social
de los abuelos.
Para una mejor utilización del tiempo libre, es importante orientar una variada gama de
actividades adecuadas a las características de las personas con edades avanzadas las
cuales podrán participar en compañía de sus amigos y familiares.
Entre ellos están:
• Juegos pasivos: También llamados juegos de mesa, (dominó, parchís, damas y
ajedrez); estos son de la preferencia de los abuelos. Se pueden organizar
campeonatos inter círculos, así como de corta y de larga duración.
• Las excursiones, festivales recreativos, los campismos, cine debates y la
participación en el concurso nacional de turismo deportivo, son actividades que
deben formar parte del programa recreativo para los círculos de abuelos.
Los juegos más adecuados a las características de los abuelos son aquellos que
desarrollen movimientos, pero que no impliquen acciones excitantes ni grandes
esfuerzos.
– Los juegos colectivos son beneficiosos, pues, facilitan el contacto social, disfrutando
todos de una actividad que los recrea y divierte.
– Los juegos calmantes, se desarrollan por lo general al final de la clase, con ellos se
busca la recuperación del organismo de forma amena.
METODOLOGÍA
Esta investigación se realizó en el combinado Deportivo LPV de la comunidad de
Buena Vista donde existen 12 Círculos de Abuelos de los cuales se realizó un estudio
detallado en el círculo de abuelos “Camilo Cienfuegos” con el objetivo de evaluar los
problemas que inciden en la participación de los ancianos con un rango de edades
entre 54 a 71 años y una edad promedio de 62 años
La asistencia a clases del 54,2 % es buena y del 41,6 es regular, solo 1 anciana
presenta mala asistencia por problemas de enfermedad; sin embargo el hecho de no
asistir de forma sistemática y el hecho de no contar con representantes del sexo
masculino nos muestra la existencia de problemas objetivos y/o subjetivos que es
necesario determinar.
Las actividades variadas que se proponen es solo una muestra derivada de la propia
experiencia y sistematizada desde los fundamentos tratados en la fundamentación
teórica. Para su fácil comprensión y socialización, se tienen en cuenta para su
estructura: título, objetivo, organización, desarrollo se incluye un espacio para la
valoración de los resultados de la aplicación de la actividad.
Las seleccionadas para este estudio son las siguientes:
Actividad # 1
Título: Caminar hacia el futuro para lograr una vida sana y placentera.
Actividad # 2
Título: Mis años de experiencias.
Actividad # 3
Título: El árbol de la vida.
Actividad # 4
Título: Nuevas amistades.
Actividad # 5
Título: Dando lo mejor de mí.
Actividad # 6
Título: Sí se puede.
Actividad # 7
Título: ¿Quién se prepara mejor?
Actividad # 8
Título: Un día de pesca.
Actividad # 9
Título: Activos de abuelos.
Análisis de los Resultados:
De 8 a 10 adultos mayores que asistían a los círculos de abuelos en estos momentos
contamos con 32, se realizaron actividades programadas junto con los diferentes
factores, se incluyó el trabajo con la familia, la comunidad, y la escuela primaria, se
observa una gran satisfacción y bienestar entre ellos , se sienten mejor preparados
física y mentalmente para enfrentar el proceso de envejecimiento, logrando incorporar
una abuela de 89 años, se logró la participación del sexo masculino aunque aún es
pobre, se le brindó ayuda a los técnicos y se logró estabilidad en los mismos, pues este
es un factor importante en el trabajo con los abuelos porque también influye en su
participación.
CONCLUSIONES
Las actividades variadas aplicadas influyeron positivamente en la incorporación del
adulto mayor al Círculo de Abuelos “Camilo Cienfuegos” del Combinado deportivo LPV
de la comunidad de Buena Vista.
Los referentes teóricos abordados en la investigación permitieron tener una concepción
más clara sobre la utilización de actividades variadas para el adulto mayor que aún no
asiste a los círculos de abuelos.
Luego del diagnóstico realizado se pudieron conocer las principales insuficiencias del
circulo de abuelo que incidian directamente en la participación del adulto mayor.
Las actividades elaboradas, contituyen un medio idóneo para lograr la participación del
adulto mayor junto a otros comunitarios pertenecientes a diversos grupos erarios; con
estas se contribuye a su formación cultural desde sus necesidades; se amplían los
espacios de socialización del grupo.
Los resultados sociales, a partir de la aplicación de las actividades variadas propuestas,
demuestran el cambio en el modo de actuación y la actitud de los integrantes del circulo
de abuelos, elevaron la participación e incluyeron adultos mayores del sexo masculino y
modifican la manera de pensar, al conocer nuevas formas de realizar actividades en
grupales.
Comentarios recientes