Palabras claves: ESTRATEGIA/TACTICA/DESTREZA/HABILIDAD/TENIS
Título: Desarrollar una inteligencia táctica en una relación de fuerza.
Título Original: Développer une intelligence tactique dans un rapport de force.
Autor(es): Pizzinato, Alain
Traductor: Alina García Vázquez (SETIDEP)
Fuente: Revue Education Physique et Sport, París, No. 285, p. 50-52, ilus.
Texto completo:
El desarrollo de la inteligencia táctica del alumno exige que él mismo se involucre en acciones que le permitan construir el punto que lo conducirá a alcanzar este objetivo. En ese contexto, una de las destrezas fundamentales que debe adquirir, es la de crear y saber utilizar a su favor una situación favorable.
Con el objetivo de lograr la interacción entre intenciones tácticas y realizaciones técnicas, las situaciones deben presentar las siguientes características:
- Conducir al alumno a adoptar un comportamiento estratégico con el objetivo de ganar el punto.
- Facilitar que se gane el punto cuando se ha puesto en práctica ese comportamiento.
- Solicitar la utilización de medios técnicos en relación con la situación.
- Mantenerse en la medida de lo posible cerca de las fases reales de juego a fin de permitir la reutilización de las adquisiciones logradas.
Tiempo de práctica efectiva.
Los alumnos efectuaron un mínimo de 30 horas de práctica efectiva.
Conductas iniciales
Los alumnos llamados en tenis, poseen un dominio mínimo de diferentes golpes de raqueta (juego de fondo de la cancha, juego en la red) y de los parámetros más simples de la trayectoria de la pelota (amplitud y dirección). Este dominio les permite realizar al menos, 4 o 5 intercambios de pelota en situación de cooperación al fondo de la cancha. Los jugadores deben también haber abordado la aceleración del golpe de la pelota, sobre todo en el golpe directo.
Condiciones de partida
Las situaciones se efectúan sobre un terreno normal con una pelota adaptada conocida como cuya velocidad disminuye después del rebote, mucho más, que cuando se trata de una pelota normal. Ese tipo de pelota, que se encuentra entre la pelota de mini-tenis y la pelota normal, facilita el intercambio, sin modificar de forma significativa las sensaciones del jugador al entrar en contacto esta pelota con la raqueta.
Teniendo en cuenta el nivel propuesto, la situación será favorable par una pelota lenta y corta, es decir aquella cuyo segundo rebote no sobrepase la línea del fondo de la cancha.
Destrezas que se desean desarrollar
- Crear una situación favorable.
- Utilizar una situación nueva en relación con la evolución del comportamiento del adversario.
Obstáculos encontrados
El desarrollo de las situaciones pone en evidencia otros comportamientos posibles que el alumno debe abandonar progresivamente para lograr adquirir las destrezas necesarias.
Los dos primeros comportamientos del alumno consisten en esperar la falta del contrario o buscar inmediatamente el punto que le permita ganar, asumiendo riesgos importantes a la hora de golpear la pelota.
Las dificultades creadas en las situaciones de juego deben mostrar inmediatamente a los alumnos, la ineficacia de esos comportamientos.
Contrariamente, el tercer comportamiento posible es mejor para el tipo de adquisiciones que se persigue lograr. Sin embargo, el mismo puede conducir a los alumnos a retomar los dos primeros comportamientos. La creación de una situación favorable es el resultado de poner al adversario en dificultades.
Esta intención es a menudo el resultado de la voluntad del jugador de provocar que el contrario cometa una falta. Cuando el jugador se da cuenta que este objetivo no se puede lograr rápidamente, es que comienza a considerar la calidad de los envíos de su contrincante.
Indicadores del final de la etapa.
Provocar la falta del contrario es por lo tanto, un comportamiento que se persigue, no tanto por la falta en sí como para obligar al adversario a defender su terreno sin correr grandes riesgos, creando de esta forma una situación favorable para el jugador.
Pero provocar la falta en el contrario, significa también correr riesgos. Puede ocurrir la pérdida de un punto, incitando al alumno a abandonar esta estrategia.
El profesor estará atento a esta posibilidad, resaltando a pesar de todo, el interés de la estrategia adoptada incluso si la eficacia es poca.
EJEMPLOS DE SITUACIONES PROBLEMÁTICAS
Para las tres situaciones de aprendizaje propuestas:
- el objetivo del profesor es la creación y la utilización de una situación favorable (la pelota corta);
- el objetivo de la tarea para el alumno es la de marcar un punto.
SITUACIÓN (figura 1)
Organización: en el inicio de la situación, enfrentamiento uno contra uno en la mitad de la cancha de tenis y sin saque.
Desarrollo: los dos jugadores están ubicados detrás de la línea de fondo de la cancha.
El saque inicial se realiza a través de un simple envío de la pelota por uno de los jugadores, dando comienzo de esta forma al intercambio.
Instrucciones
Siempre que los jugadores se mantengan (o estén obligados a hacerlo) por detrás de la línea de fondo de la cancha para realizar el reenvío de la pelota contraria, deben mantenerse únicamente en la mitad del terreno y sin jugar en la red.
Regla complementaria:
Desde el momento que uno de los dos jugadores logra penetrar al interior de su cancha par reenviar la pelota que ha sido enviada por el adversario, puede utilizar todo el terreno para producir un efecto de desbordamiento. También puede anotar en la red.
Mayor complejidad
el jugador que pierde el tanto esta obligado a comenzar la situación valiéndose solamente de su revés. Solamente una pelota corta contraria podría permitirle la utilización de un golpe directo;
el saque se utiliza para iniciar la puntuación. Se dispone por un lado los saques jugados contra el adversario y por otra parte el que devuelve podrá ubicarse en el interior del terreno en el segundo saque contrario pero deberá regresar al fondo de la cancha después devolver. El que gane el punto sirve;
una banda del juego esta construida sobre la diagonal del terreno.
Comportamiento previsto
Cuando el jugador logra golpear la pelota en el interior del terreno, la otra mitad del terreno puede ser utilizada. En ese caso, el hecho de que jugador contrario este cerca de la línea lateral simple, lo que viene dado por el comienzo del juego en la mitad de la cancha (dificultad), lo ubica lejos de un juego cruzado de pelota.
Situación 2 (figura 2)
Organización:
Situación de oposición uno contra uno en una cancha de tenis al comienzo de la situación y sin saque.
Desarrollo
Idéntico al de la situación 1.
Instrucciones
Ninguno de los dos jugadores puede usar su revés.
Mayor complejidad
- los jugadores poseen un número limitado de posibilidades de juego con revés;
- el juego puede comenzar con un saque normal en cuyo caso el que reenvía tiene la posibilidad de utilizar el revés para reenviar la primera pelota del saque de su adversario;
- se prohibe el juego en la red para acentuar la preparación del punto en el fondo de la cancha.
Comportamientos previstos
El hecho de no utilizar el revés (dificultad) conduce frecuentemente al jugador a ubicarse sobre su revés lateral. Esto le permite sobretodo, organizar más rápidamente un golpe directo a una pelota jugada por su adversario en esta parte de la cancha . Esa elección libera un espacio importante para su golpe de raqueta lateral derecho utilizable en un golpe de desbordamiento que permita la victoria sin importantes riesgos para el jugador contrario.
SITUACIÓN 3 (figura 3)
Organización: idéntica a la de la situación 2.
Desarrollo: idéntico al de la situación precedente.
Instrucción: los dos jugadores están obligados a golpear toda pelota que sea enviada por el contrario, después de un rebote (prohibición de efectuar el golpe de raqueta de volea).
Mayor complejidad
- el juego puede comenzar a partir de un servicio normal de tenis;
- lograr que la situación se produzca en la mitad de la cancha, para incitar a los jugadores a preparar el ataque del terreno contrario de manera más precisa.
Comportamientos previstos
La imposibilidad del juego sin rebote (dificultad), obliga al jugador a evitar el juego en la red.
La obtención de un punto es rápidamente posible para el jugador que por una pelota corta, obliga a su adversario a jugar cerca de la red, logrando volver a jugar antes que el contrario pueda regresar al fondo de la cancha. Esta forma de juego solo es posible, por supuesto, en la medida en que el jugador que se encuentra cerca de la red la pelota a su adversario en el fondo de la cancha.
En esta situación, una pelota corta del jugador que se encuentra cerca de la red, le permite anotar un punto.
Lo que favorece esa situación, es el encadenamiento de respuestas.
LOS COMPORTAMIENTOS QUE SE DEBEN PONER EN PRÁCTICA
Las situaciones que utilizamos presentan algunas diferencias con relación a los principios de construcción de las situaciones – problemas (1).
Facilitación de la acción.
Si nuestro objetivo es el de plantear un problema al alumno que exija de él un análisis de la situación en curso y una puesta en práctica de sus conocimientos adaptados, nuestra preocupación también es, la de facilitar ese análisis así como las respuestas que se deben dar.
Al principio, la creación de una dificultad (imposibilidad de utilizar el revés o la obligación de jugar luego de un rebote por ejemplo) obliga al alumno a buscar posibles soluciones al problema que se le plantea.
En un segundo tiempo, el éxito de la puesta en práctica, por parte del alumno, de una posible solución está facilitada por la dificultad que su adversario enfrenta. En efecto, en cada situación, los jugadores son confrontados alternativamente a la dificultad. Los jugadores crean de esta forma nuevas estrategias para poder jugar. Pero la respuesta que uno de los dos jugadores dé a la misma, lo pondrá en aprietos para el resto del intercambio.
La obtención del punto será más fácil en la medida en que el alumno tenga en cuenta esta situación.
Ese cambio de de la dificultad durante el desarrollo de la situación constituye la primera diferencia.
CARACTÉRISTICAS TEMPORALES DEL APRENDIZAJE
La segunda diferencia es inherente a la forma de obtener un resultado en un duelo, y sobretodo en deportes de raqueta. En efecto, el hecho de ganar o perder un punto no está siempre sujeto a la adecuación entre intención y realización. En este sentido, el alumno puede alcanzar el objetivo de la situación problema sin haber puesto en juego los comportamientos que de él se esperaban.
La obtención de un punto puede lograrse al producirse una falta del contrario. Esta limitación puede ser subsanada con . En el contexto de nuestras situaciones, el objetivo que se persigue es el de la producción de comportamientos que conduzcan lo más frecuentemente posible al éxito.
No se es tan ambicioso en cuanto a la relación directa entre aprendizaje y la solución que se le dé al problema planteado.
La mejoría en el porciento de situaciones jugadas exitosamente, es el único indicador de lo que realmente se ha logrado a través del aprendizaje.
El encadenamiento y la progresión de los problemas.
El objetivo de las situaciones propuestas es la búsqueda de una solución al problema que surge ante una dificultad determinada.
En este sentido nuestra acción conduce o debe conducir al alumno, a construir el punto. Una de la característica de estas situaciones – problemas, es que no poseen una única respuesta. En cada situación, cuando uno de los dos jugadores ha respondido eficazmente, se produce a su vez, una modificación de la respuesta del contrario. Esta modificación convierte en inadecuada la reproducción de la solución precedente, en el próximo intento. Aunque el contexto sea el mismo (la organización, las instrucciones), la aparición de un nuevo problema se produce como consecuencia del movimiento defensivo utilizado.
Si el jugador quiere ganar un punto, debe considerar este nuevo del problema para darle una solución diferente (2).
Esta progresión del problema en la construcción de un punto es una de las características originales de la situación – problema en tenis.
Revisado y actualizado por: Lic. Mariela C. Z. (13/01/03)
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